Nueve estudiantes de UTEC fueron elegidos entre los 50 mejores proyectos en el programa Euromodelo Joven edición Uruguay sobre mitigación del cambio climático

Cumplieron con todas las etapas y fueron elegidos entre los 50 mejores. Nueve estudiantes de UTEC se graduaron del programa Euromodelo Joven en su edición 2020 sobre cambio climático. Fueron reconocidos por la organización y sus proyectos estuvieron entre los seleccionados en Uruguay.

Eruomodelo Joven es un programa de formación en liderazgo para universitarios que busca acercar a las instituciones de la Unión Europea con los jóvenes y formar a los futuros tomadores de decisiones. Los participantes conocen las instituciones de la Unión Europea y sus valores y aprenden sobre tomar decisiones de políticas públicas.

Por primera vez este 2020 se realizó la edición uruguaya de Euromodelo Joven en la que participaron estudiantes de diferentes universidades.

Se inscribieron inicialmente 51 estudiantes de UTEC de un total de 320. Los inscriptos de la Universidad Tecnológica estudian las carreras de Ingeniería en Energías Renovables, Ingeniería Agroambiental e Ingeniería en Sistemas de Riego Drenaje y Manejo de Efluentes.

El ejercicio final consistió en elaborar una propuesta para presentar ante el Parlamento europeo que busque abordar una problemática actual vinculada al cambio climático y que tome en cuenta aspectos como el legislativo de de la Unión Europea.

Los participantes realizaron el ejercicio de simulación de las instituciones de la Unión Europea: la Comisión Europea, el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea. Además debieron presentar proyectos realizables en la Unión Europea y esta edición estuvo centrada en aquellos vinculados al cambio climático.

“La temática de Euromodelo Joven este año fue el cambio climático. En la carrera Ingeniería Agroambiental en UTEC damos una materia llamada Cambio climático y manejo de recursos naturales. Cuando recibimos la invitación a participar desde la Unidad de Relacionamiento Internacional (URI) de UTEC vimos que eran temáticas del curso. Nuestros estudiantes se anotaron, hicieron el curso, presentaron ideas y las adaptaron a la realidad europea”, destacó Natalie Aubet, coordinadora de la carrera Ingeniería Agroambiental.

Entre las principales funciones de la Unión Europea figura la promoción de una mayor conciencia sobre el cuidado del ambiente y la lucha contra el cambio climático así como el fomento del desarrollo sostenible, según información de Euromodelo.

Dos estudiantes de Agroambiental y uno de Energías Renovables completaron el programa, participaron de las instancias finales y contaron su experiencia.

Ecoladrillos y construcción sustentable

Agustina Etchissure tiene 20 años y nació en Flores, aunque hace diez que vive en Durazno. Está finalizando su segundo año de la carrera Ingeniería Agroambiental en UTEC.

Lo que la motivó a anotarse en Euromodelo Joven fue justamente el tener la posibilidad de proponer ideas para mitigar el cambio climático, tema que ha ido trabajando durante la carrera. “Era muy bueno tener la posibilidad de demostrar mi potencial en este tipo de eventos y posicionar bien alto a la carrera”, destacó.

Presentó un proyecto que tituló "Mitigación del Cambio Climático mediante el incentivo a la producción de ecoladrillos" y fue reconocida por el buen resultado en las instancias de formación de Euromodelo Joven.

Planteó un proyecto piloto para ser establecido en primera instancia en la Comunidad Autónoma de Asturias en España (como indica la consigna, pasible de ser aplicado en Europa), donde hay un muy bajo índice de reciclaje per cápita y a su vez un alto índice de pobreza. Agustina planificó talleres y capacitaciones sobre el plástico como agente contaminante y posteriormente sobre la elaboración de ecoladrillos de forma adecuada.

Sobre los ecoladrillos, Agustina explica: “consisten de una botella vacía, limpia y seca, en donde se insertan diferentes tipos de plásticos no biodegradables lo más comprimidos posibles para crear un ladrillo ecológico de buena calidad”.

El objetivo final es que fueran utilizados en la construcción de viviendas para personas en situaciones vulnerables. Agustina destacó que en su proyecto las personas que produjeran una determinada cantidad de ecoladrillos, serían incentivadas de manera mensual en primera instancia con descuentos en algún servicio de tarifas públicas. Si bien no estuvo planteado dentro del programa que los proyectos se lleven a cabo, el solo ejercicio de aprendizaje y planificación fue muy valioso, evaluó Agustina.

Educación, huerta y conciencia ambiental

Marikena Rodríguez tiene 22 años y, al igual que Agustina, vive en Durazno y está terminando de cursar el segundo año de la carrera Ingeniería Agroambiental en UTEC. Se anotó en Euromodelo Joven porque la temática de este año destinada a la mitigación del cambio climático tiene una conexión con temas que venía estudiando en la carrera. Cursó la asignatura Cambio climático y por medio de esta tuvo la oportunidad de realizar otro curso promovido por la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre mitigación, adaptación y cambio climático. Era un tema que tenía muy presente y cuando le contaron de Euromodelo no dudó.

“Lo más rico de esta experiencia que viví como estudiante fue compartir con 50 estudiantes universitarios de todo Uruguay de instituciones públicas y privadas, generando debates por medio de distintas visiones y con el mismo fin de mitigar el cambio climático”, comentó Marikena. “Es un aprendizaje único, también conocí la importancia mundial que genera el organismos de la Unión Europea”, agregó.

Marikena participó de Euromodelo Joven en el rol de comisaría que tenía el fin de proponer ideas. “No fue nada fácil debido a que tenía que ser dirigido a Europa que es uno de los continentes más avanzados en mitigación de cambio climático”, contó sobre el desafío.

Su propuesta consistió en relacionar la educación con el ambiente. Dirigido a instituciones primarias públicas, el planteo fue incrementar con trabajos prácticos obligatorios la producción de sus propios alimentos con el fin de desarrollar conocimiento y responsabilidad ambiental en edades tempranas. Por medio de este plan se podría integrar la huerta en instituciones educativas con un plan verde destinado a niños que cursan quinto y sexto año de la primaria con estudiantes de un promedio de edad entre 10 y 12 años. Además, planteó que los alimentos cosechados sean destinados a canastas alimenticias para niños de bajos recursos y así colaborar con varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

La propuesta fue aprobada de forma unánime por el parlamento de Euromodelo joven 2020. Marikena destacó que esta propuesta podría incluso ser destinada a primaria en Uruguay en donde ya hay escuelas que realizan un trabajo similar.

Para Marikena hay una frase que resume su propuesta: "Todos los niños nacen genios hasta que la sociedad y educación aplasta su espíritu científico" del físico estadounidense Michio Kaku.

Experiencia que valió la pena

Mauricio Faguaga tiene 20 años, es de Minas, Lavalleja y estudia Ingeniería en Energías Renovables en UTEC en Durazno. Cuando se enteró de Euromodelo y que el tema era cambio climático también le resultó atractivo. Además, le gustó la propuesta de asumir diferentes roles dentro de la Unión Europea. En su caso le tocó ser ministro en representación de Italia y estuvo entre el grupo de comisaría que realizaba las propuestas al Parlamento.

Cada comisario debía crear una propuesta que luego era votada y pasaba a una segunda ronda. Esta segunda instancia se llevó a cabo en un evento presencial el 30 de noviembre de 2020 (ver fotos). Todos pudieron dar sus puntos de vida con una variable muy valorada este año, la presencialidad.

“Me quedo con cada persona que conocí, con cada diálogo. Teníamos que defender nuestro partido político y lo hacíamos como partido. Además, afuera se formó una amistad muy linda que seguimos en un grupo de Whatsapp. Se siente el grupo muy unido de esos que están al pie del cañón para cualquier cosa”, dijo Faguaga.

“La idea de Euromodelo era aprender a defender nuestros puntos de vista, a comunicarnos con otras personas. Fue el primer año que se hizo en Uruguay” destacó Faguaga, quien se inscribirá en 2021 para participar nuevamente en caso de que se repita el programa. Además, si bien las propuestas terminaron en planteos de ideas, Faguaga las tendrá en cuenta “para que en Uruguay se lleven a cabo y aprovechar el tiempo destinado a cada propuesta que valió la pena”, en futuras oportunidades y grupos de trabajo que planea integrar, opinó.