UTEC inaugura sede en Cerro Largo en edificio histórico de Melo

A pocos metros de la terminal de ómnibus, por la calle Manuela Lestido, allí se encuentra la nueva sede de la Universidad Tecnológica (UTEC) en Melo. Consta de 650 m2 distribuidos en tres plantas, y un espacio exterior de 280 m2. La intervención arquitectónica que realizó UTEC abarcó únicamente la planta baja de 320 m2, y el patio exterior. La remodelación preservó gran parte de la estructura ya existente, como su fachada de ladrillos caravista, y el patio, en el que se mantienen árboles antiguos y se le agregó un pequeño anfiteatro multipropósito, ideal para actividades de esparcimiento. 

La planta baja cuenta con tres salas de diferentes características: un aula 3.0 especialmente amoblada para realizar trabajos en equipo, un aula de informática con 13 computadoras de escritorio y un aula convencional con monitores y mesabancos giratorios. Además, el edificio tiene una sala de lactancia, un área administrativa y de uso docente, una kitchenette y un depósito. La inversión total, incluyendo el equipamiento y mobiliario, es de 1.200.000 dólares aproximadamente.

Los dos entrepisos de estructura de metal y madera —de 165 m2 cada uno—, fueron recuperados para una futura segunda etapa de obras. Estos espacios habían sido dañados en 2018 por un incendio ocasionado por un rayo.

Actualmente desde la sede de UTEC en Melo es posible cursar Ingeniería en Agua y Desarrollo Sostenible, Licenciatura en Tecnologías de la Información y se está en proceso de selección para una nueva corte de Bootcamp Full Stack de UTEC (un entrenamiento intensivo en programación con prioridad para quienes residan en Cerro Largo y para mujeres).

La oferta educativa de UTEC en Cerro Largo: dos carreras de grado y otras alternativas de formación que ya cambiaron realidades 

UTEC inauguró el martes 27 de junio su sede en Cerro Largo, un paso más para la presencia de la Universidad Tecnológica en el departamento ya que desde 2022 comenzó a formar jóvenes de la comunidad arachana. 

Franco Duarte (24) es uno de los estudiantes de la Licenciatura en Tecnologías de la Información de UTEC que inició la carrera en 2022 desde Cerro Largo. Vive en Fraile Muerto, una ciudad ubicada a unos 40 kilómetros de Melo y concurre a la nueva sede de UTEC más de lo estrictamente necesario. Además de asistir cada 15 días a las clases presenciales, por decisión personal va otras veces para estudiar en equipo con un grupo de compañeros.

“La nueva sede es extraordinaria, con un personal súper acogedor y con muchas comodidades. Para mi equipo, The big five, la sede es un punto de encuentro para la realización de trabajos, con la facilidad de poder usar todo lo que se encuentra allí”, contó el estudiante.

Sentado a la izquierda el estudiante Franco Duarte, junto a compañeros y docentes de LTI

“Estudiar cerca de mi casa es una gran ventaja, no solo por la parte económica sino porque también puedo hacer un equilibrio casi perfecto en mi día a día. Además, estudiar en una modalidad híbrida me ha permitido combinar mis actividades y responsabilidades, ya que actualmente me encuentro trabajando en la construcción de mi vivienda propia”, agregó.

La Licenciatura en Tecnologías de la Información es una carrera semipresencial de cuatro años de duración que comenzó a impartirse en agosto de 2022 en Melo. Para las clases presenciales, quincenales, se contó con el apoyo de la Universidad de la República que cedió un salón en su Casa de la Universidad de Cerro Largo (Cucel). Ingresaron inicialmente 40 estudiantes, y en marzo de 2023 comenzó otro grupo, por lo que hoy son 65 activos en el departamento.

Franco junto a su equipo de trabajo, se encuentra desarrollando el proyecto de cierre del segundo semestre de la carrera que consiste en una aplicación de software para el equipo de analistas administrativos. “El objetivo es agilizar el proceso administrativo. Al finalizar el proyecto, el software deberá permitir el perfecto registro de usuarios, las solicitudes de constancias o escolaridades, y el ingreso de eventos o reclamos”, comentó.

Desde marzo de 2022 UTEC ofrece en el territorio la Ingeniería en Agua y Desarrollo Sostenible, una formación de grado, semipresencial, de cinco años de duración. Esto fue posible gracias al apoyo de la Intendencia Departamental de Cerro Largo, quien mediante un convenio se comprometió a brindar el transporte, gratuitamente, para los estudiantes que viajan quincenalmente hasta el Instituto Tecnológico Regional Centro Sur, en Durazno, donde se encuentran los laboratorios de la carrera en los que se realizan las clases prácticas. Actualmente la carrera tiene 24 estudiantes de Cerro Largo.

Trabajar desde Melo con compañeros de Estados Unidos

Otra de las propuestas de formación que UTEC está llevando a Cerro Largo es el Bootcamp de Desarrolladores Full Stack que actualmente está en proceso de selección para cubrir 15 cupos con prioridad para quienes viven en Cerro Largo y mujeres. El curso intensivo de 12 semanas de duración requiere que los estudiantes dediquen ocho horas diarias a aprender a programar en los lenguajes más demandados del mercado, como JavaScript, React y Python. El esfuerzo vale. 

Laura Magallanes (35) fue una de las 14 personas seleccionadas para cursar la primera edición del Bootcamp con prioridad para Cerro Largo en agosto de 2022, con financiación de Santander Universidades. Laura es Química Farmacéutica de formación, en 2017 se radicó en Paso Centurión, a 60 km de Melo, en donde abrió un emprendimiento turístico. Se mudó allí desde Montevideo en busca de un cambio de vida lejos de la gran ciudad y en contacto con la naturaleza. 

En el centro de la foto Laura Magallanes acompañada por docentes de UTEC

Durante la pandemia por la Covid-19 buscó alternativas como salida económica. Tras hacer algunos cursos breves de programación en Internet, le llegó la información del Bootcamp de UTEC y no dudó en anotarse. “Fue de las mejores experiencias educativas que tuve, súper intenso, pero al estar ocho horas por día escribiendo código, empezás a entender todo muy rápido. El sistema educativo es súper interesante y muy efectivo”, comentó Laura.

Ella no tuvo la necesidad de salir activamente a buscar empleo. Ni bien finalizó el Bootcamp fue invitada a participar como Teaching Assistant full time para la edición del mismo curso de UTEC en la ciudad de Minas. Luego se sumó como Program Manager a la empresa 4Geeks Academy desde donde colabora en la organización de cursos similares a los que ella realizó, corrige trabajos de estudiantes en colaboración con el plantel docente, testea las plataformas, entre otras tareas.

Trabajar remotamente y hacerlo con compañeros de Estados Unidos y diferentes partes de Latinoamérica, es algo que Laura valora. Le da la posibilidad de movilizarse, organizar sus horarios para hacer otras actividades, y además, practicar inglés.

“Lo súper recomiendo, puede generar un cambio de vida real más allá de la edad, el contexto, de lo que hayas hecho previamente. Está pensado para que personas que no tienen nada de conocimiento de programación puedan realizarlo”, asegura Laura, quien ahora está estudiando Machine Learning y Data Science a través de su trabajo.                                                                                                                                                

De molino a Universidad: un recorrido por la historia de la nueva sede de UTEC en Melo

El edificio de la sede de UTEC en Melo fue construido durante los primeros años del siglo XX cuando Martín Baraibar —inmigrante vasco y panadero de profesión que se radicó en la entonces Villa Melo en 1876— decidió incrementar su negocio de panadería y ramos generales e incorporar un molino harinero. Esta antigua industria, ahora convertida en Universidad, ya comenzó a recibir estudiantes. Pero, ¿cuál ha sido su historia?

Según el historiador arachán Marcos Hernández Desplatz, el molino de Baraibar empezó a funcionar en 1907 y se convirtió rápidamente en un dinamizador de la economía regional. Martín Baraibar entregaba toneladas de semillas de trigo a decenas de agricultores y luego les compraba el producto de la cosecha. Con el trigo adquirido, elaboraba los productos de panadería y fideería con los que abastecía a Melo y la región. Tras su fallecimiento, en 1932, el negocio siguió funcionando de la misma manera bajo la dirección de sus hijos José y Celestino.                                                 .                                                                              

Foto del edificio del ex Molino de 1914, gentileza Biblioteca Departamental de Cerro Largo

En 1943 los hermanos Baraibar vendieron el molino a la firma Grandes Molinos Nacionales S.A. La nueva empresa —conocida como Gramón— siguió otorgando semillas y asegurando a los productores la compra de su cosecha, al mismo tiempo que comenzó a adquirir girasol en grandes cantidades.

En 1971, en medio de la crisis económica y política que atravesaba el país, el molino finalizó su etapa industrial. A comienzos del siglo XXI, el predio pasó a manos de la Intendencia Departamental de Cerro Largo y albergó actividades culturales. Funcionó allí la escuela de Teatro Justino Zabala Muniz y luego la Casa del Artesano, en la que los artistas del departamento exhibían y comercializaban sus obras. 

En 2018, una fuerte tormenta eléctrica provocó el incendio del techo y los pisos superiores del edificio, sin generar graves daños estructurales.

Finalmente, en 2021, el gobierno departamental bajo el mandato del intendente José Yurramendi, decidió ceder el inmueble en comodato a la Universidad Tecnológica.